Fuente: http://www.aciprensa.com/aborto/men-ver-aborto.htm
Reproducción parcial del artículo original, que es mucho más extenso.
Reproducción parcial del artículo original, que es mucho más extenso.
Hay muchos argumentos que se han
difundido insistentemente, especialmente en aquellos países donde, con
cualquier motivo, intentan buscar la legalización del aborto o ampliarlo allí
donde ya se ha legalizado alguna de sus formas.
Es inhumano no legalizar el
"aborto terapéutico" que debería realizarse cuando el embarazo pone a
la mujer en peligro de muerte o de un mal grave y permanente
La Verdad: En este caso el término "terapéutico" es
utilizado con el fin de confundir. "terapia" significa curar y en
este caso el aborto no cura nada. Actualmente, la ciencia médica garantiza que
prácticamente no hay circunstancias en la cual se deba optar ente la vida de la
madre o la del hijo. Ese conflicto pertenece a la historia de la obstetricia.
Ya en 1951, el Congreso de Cirujanos del American College dijo que "todo
el que hace un aborto terapéutico o ignora los métodos modernos para tratar las
complicaciones de un embarazo o no quiere tomarse el tiempo para usarlos"
. El temido caso de los embarazos "ectópicos" o que progresan fuera
del útero materno están siendo manejados médicamente cada vez con mayor
facilidad. por otro lado, el código de ética médica señala que en el caso de
complicaciones en el embarazo deben hacerse los esfuerzos proporcionados para
salvar a madre e hijo y nunca tener como salida la muerte premeditada de uno de
ellos.
Es brutal e inhumano permitir que una mujer tenga el hijo producto de
una violación, por ello, para estos casos, debería legalizarse el aborto
llamado "sentimental".
La Verdad: En un estudio se comprobó que el 51% de los
violadores experimentaron disfunciones que no les permitieron terminar el acto
sexual. Otra causa por la que son extremadamente raros los embarazos por
violación: la total o temporal infertilidad de la víctima. La víctima puede ser
naturalmente estéril; puede ser muy joven o muy vieja, puede estar ya embarazada
o puede haber otras razones naturales.
El 43% de las víctimas se
encontraba en estas categorías. La víctima puede estar tomando anticonceptivos,
tener un DIU o ligadura de trompas, el 20% se situaba en esta categoría. Así,
sólo una minoría de las víctimas tienen un potencial de fertilidad. Además de
la infertilidad natural, algunas víctimas están protegidas del embarazo por lo
que se ha llamado stress de infertilidad; una forma de infertilidad temporal como
reacción al stress extremo. El aborto no
va a quitar ningún dolor físico o psicológico producido en una violación. Al
contrario, le va a agregar las complicaciones físicas y psíquicas que ya el
aborto tiene de por sí. Por otro lado, el fruto de este acto violento es un
niño inocente, que no carga para nada con la brutal decisión de su padre
genético.
Es necesario eliminar a un niño con deficiencias porque él sufrirá
mucho y le ocasionará sufrimientos y gastos a los padres.
La Verdad: Este principio, conocido como "aborto
eugenésico" se basa en el falso postulado de que "los lindos y
sanos" son quienes deben establecer el criterio de valor de cuándo una
vida vale o no. Con ese criterio, tendríamos motivo suficiente para matar a los
minusválidos ya nacidos.
El aborto debe ser legal porque todo niño debe ser deseado.
La Verdad: Este es un argumento absurdo. El "deseo" o
"no deseo" no afecta en nada la dignidad y el valor intrínseco de una
persona. El niño no es una "cosa" sobre cuyo valor puede decidir otro
de acuerdo a su estado de ánimo. Por otro lado, el que una mujer no esté
contenta con su embarazo durante los primeros meses no indica que esta misma
mujer no vaya a amar a su bebé una vez nacido. Se ha podido comprobar que en
los países donde el aborto está legalizado, se incrementa la violencia de los
padres sobre los niños, especialmente la de la madre sobre sus hijos aun cuando
sean planificados y esperados.
El aborto debe ser legal porque la mujer tiene derecho a decidir sobre
su propio cuerpo.
La Verdad: Pero no cuando el sentido común y la ciencia moderna
reconocen que en un embarazo hay dos vidas y dos cuerpos. Mujer, según
definición de diccionario, es un "ser humano femenino". Dado que el
sexo se determina cromosómicamente en la concepción, y más o menos la mitad de
los que son abortados son "seres humanos femeninos"; obviamente NO
TODA MUJER TIENE DERECHO A CONTROLAR SU PROPIO CUERPO.
Con la legalización del aborto se terminarían los abortos clandestinos.
La Verdad: Las estadísticas en los países "desarrollados"
demuestran que esto no es así. Por el contrario, la legalización del aborto lo
convierte en un método que parece moralmente aceptable y por tanto, como una
opción posible que no es igualmente considerada allí donde no es legal.
Pero dado que la gran mayoría de
abortos no son por un motivo "sentimental", "terapéutico" o
"eugenésico", sino por un embarazo considerado
"vergonzoso", no es extraño que la mujer -especialmente si es
adolescente o joven- busque igualmente métodos abortivos clandestinos por la
sencilla razón de que una ley, aunque quite la pena legal, no quita la
verguenza y el deseo de ocultamiento.
El aborto debe ser legal porque la mujer tiene derecho sobre su propio
cuerpo.
La Verdad: ¿Tiene una persona derecho a decidir sobre su propio
cuerpo? Sí, pero hasta cierto punto. ¿Puede alguien eliminar a un vecino
ruidoso sólo porque molesta a sus oídos? Obviamente no. Es igual en el caso del
aborto. La mujer estaría decidiendo no sobre su propio cuerpo, sino sobre el de
un ser que no es ella, aunque esté temporalmente dentro de ella.
El aborto es una operación tan sencilla como extraerse una muela o las
amígdalas. Casi no tiene efectos colaterales.
La Verdad: Las cifras desmienten esta afirmación. Después de un
aborto legal, aumenta la esterilidad en un 10%, los abortos espontáneos también
en un 10%, y los problemas emocionales suben del 9 al 59%. Además, hay
complicaciones si los embarazos son consecutivos y la mujer tiene el factor RH
negativo. Los embarazos extra-uterinos aumentan de un 0.5% a un 3.5%, y los
partos prematuros de un 5% a un 15%. También pueden darse perforación del
útero, coágulos sanguíneos en los pulmones, infección, y hepatitis producida
por las transfusiones, que podría ser fatal.
Además, cada vez más
investigaciones tienden a confirmar una importante tesis médica: que la
interrupción violenta del proceso de gestación mediante el aborto afecta las
células de las mamas, haciéndolas sensiblemente más propensas al cáncer.
Algunos partidarios del aborto incluso han llegado a plantear que el aborto es
menos peligroso que un parto.
Esta afirmación es falsa: el
aborto, especialmente en los últimos meses del embarazo, es notablemente más
peligroso. En los países ricos mueren dos veces más mujeres por aborto legal
que por disfunciones del parto. Por otro lado, algunas mujeres tienen problemas
emocionales y psicológicos inmediatamente después del aborto, otras los tienen
muchos años después: se trata del Síndrome Post Aborto. Las mujeres que lo
padecen niegan y reprimen cualquier sentimiento negativo por un periodo
promedio de al menos cinco años. Después surgen una variedad de síntomas, desde
sudoraciones y palpitaciones hasta anorexia, alucinaciones y pesadillas. Los
síntomas son sorprendentemente similares a los del Síndrome de tensión post
traumático que sufrieron algunos veteranos, 10 años o más después de haber
combatido en una guerra.