martes, 20 de abril de 2010

VIGILIA POR LAS VOCACIONES

El próximo sábado 24 de abril, se hará una vigilia especial en oración, en el templo de la Parroquia de San Cipriano, entre las 7:00 y las 9:00 p.m., a la cual la Sra. Marina de Lara, laica responsable de las actividades de promoción de las vocaciones sacerdotales, esta invitando a todos los laicos miembros de los diferentes grupos pastorales de la Parroquia.

Esta vigilia se ha organizado como parte de las actividades de exaltación de las vocaciones sacerdotales, en un momento en el que la Iglesia Católica viene siendo blanco de ataques de diversa índole, originados en las fallas que han tenido algunos miembros del cuerpo eclesiástico en varios lugares del mundo.

Si bien nuestra Iglesia es una organización de inspiración y origen divino, ya que el primer y supremo sacerdote fué Jesucristo, es claro que es una organización integrada por seres humanos, entre los cuales -como en cualquier actividad humana- pueden ocurrir casos de debilidad humana y de pecado, que muchos críticos parecen ignorar, reviviendo un poco la escena vivida por aquellos que querían apedrear a la mujer encontrada en adulterio.

La pregunta de Jesús: "El que esté libre de pecado que tire la primera piedra" parece oirse hoy nuevamente bajo el contexto histórico actual. Y no se trata de que los comportamiento errados de algunos ministros deban ser ignorados o cubiertos por la impunidad, porque desde la misma Santa Sede, Su Santidad Benedicto XVI ha condenado tales hechos. La reflexión apunta más directamente a que la misma Iglesia provea los mecanismos para ejercer una disciplina y un seguimiento mayor a los casos que sean contrarios a los valores cristianos y a la responsabilidad del ejercicio del sacerdocio ministerial. Es decir ejercer eficazmente su propio autocontrol.

Esperamos a todos los visitantes de este blog, para que nos acompañen en oración a la vigilia programada, para que por fuerza de la oración y las plegarias al Señor, podamos conseguir el favor divino en beneficio de nuevas y santas vocaciones sacerdotales. La Iglesia las necesita. La mies es mucha y los obreros pocos.